

¿Y vale lo que pesa? Claro que sí, este pequeño exitoso modelo de Fiat, todo un suceso a nivel mundial, ha sido pintado con un polvo micronizado de oro de 24 quilates disperso en un barniz transparente en baño de platino. Y para justificar aún más su exclusividad, StudioM, encargado del desarrollo del modelo, ha creado un tablero recubierto en madreperla australiana (una especie de nácar muuuuy caro) y asientos e interior de un tapizado que puede ser elegido por el cliente.
Según informan los medios italianos, se puede elegir entre piel de cocodrilo, avestruz, serpiente e incluso de tiburón (esperemos que sean imitación). Por supuesto no faltan las incrustaciones de cristales Swarovski en los pedales, el freno de mano y el pomo de la palanca de cambio. Ah, calza neumáticos ¡también recubiertos de oro!, y llantas OZ, que no desentonan.

Fuente: Clarin.com
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